Establecido oficialmente por las Naciones Unidas en 2003 y celebrado cada año el 11 de diciembre, el Día Internacional de las Montañas es una oportunidad única para reflexionar sobre la importancia de las montañas para la salud y el bienestar del planeta y sus habitantes.
A pesar de su grandeza, las montañas son especialmente vulnerables al cambio climático, la deforestación, la urbanización y la explotación de recursos. El calentamiento global está acelerando el deshielo de los glaciares de montaña, amenazando el suministro de agua para millones de personas. Además, muchas comunidades de montaña se enfrentan a problemas de pobreza y aislamiento.
Por ello, el evento pretende concienciar sobre el valor de las montañas, no sólo como lugares de excepcional belleza natural, sino también como ecosistemas y hábitats vitales para muchas comunidades humanas. Para ello, cada año se elige un tema para la celebración, y el de este año es "Soluciones de montaña para un futuro sostenible: innovación, adaptación, juventud y más allá". La atención se centra en las soluciones innovadoras, el fomento de estrategias de adaptación y la capacitación de los jóvenes para un futuro sostenible.
Así pues, las palabras clave del acto de este año son:
- Innovación: la importancia de los avances tecnológicos, como las herramientas digitales y las soluciones creativas, para vigilar y conservar eficazmente los ecosistemas de montaña;
- Adaptación: Necesidad de estrategias para crear resiliencia ante el cambio climático, con especial atención a la reducción del riesgo de catástrofes;
- Empoderamiento de los jóvenes: Participación activa e inclusiva de las nuevas generaciones en los procesos de toma de decisiones para garantizar la sostenibilidad de las soluciones futuras.
En este sentido, meteoblue ofrece una amplia gama de herramientas para contribuir a la conservación de las montañas.
En primer lugar, datos históricos y climáticos que pueden apoyar la investigación de las tendencias climáticas en las regiones montañosas. Muchos proyectos de investigación, como el Miage Glacier Project, utilizan datos meteoblue para controlar el impacto del cambio climático en el retroceso de los glaciares.
Entre las herramientas esenciales para aplicar medidas de adaptación y mitigación que proporciona meteoblue se encuentra climate+, que incluye herramientas para evaluar riesgos como el deshielo, los corrimientos de tierras y las lluvias torrenciales, esenciales para los sistemas de alerta temprana y la preparación ante catástrofes en regiones montañosas.
Estos y muchos otros servicios hacen de meteoblue una herramienta valiosa para investigadores, formuladores de políticas y organizaciones de conservación que trabajan para proteger los entornos montañosos mientras se adaptan a los desafíos de un clima cambiante.